El último tilacino fue filmado y fotografiado con vida en el año 1933, mientras deambulaba en el interior de su jaula en el zoo de Hobart, en Tasmania. Tres años después, este último ejemplar moriría por un despiste de sus cuidadores: olvidaron cerrar la jaula en que dormía y el animal murió de frío. Las últimas imágenes del tilacino, mudas y enigmáticas, nos muestran un animal que parece sacado de un relato fantástico. (Seguir leyendo) (English)
A pesar de su forma de lobo y su pelaje atigrado, su procedencia nada tenía que ver con cánidos o felinos. Se trataba de un extraño caso de marsupial carnívoro, con unas mandíbulas realmente asombrosas, capaces de abrirse hasta un ángulo de 120 grados. Este hecho les permitía engullir grandes pedazos de carne y tragar de un modo más parecido al de las serpientes que al de un mamífero convencional.
El tilacino, o tigre de Tasmania, fue declarado extinto en 1986, una vez transcurridos los 50 años sin pruebas de vida que exige la comunidad científica. Aún así, muchos curiosos y turistas aseguran haberse topado con un tilacino desde entonces. En 1973, alguien grabó unas misteriosas imágenes en las que muchos han creído distinguir la figura del tigre de Tasmania. Al igual que el tilacino, al final de la película, el animal se pierde como un fantasma en la oscuridad.
Más: 1, 2, 3 / In English: The last thylacine
A pesar de su forma de lobo y su pelaje atigrado, su procedencia nada tenía que ver con cánidos o felinos. Se trataba de un extraño caso de marsupial carnívoro, con unas mandíbulas realmente asombrosas, capaces de abrirse hasta un ángulo de 120 grados. Este hecho les permitía engullir grandes pedazos de carne y tragar de un modo más parecido al de las serpientes que al de un mamífero convencional.
El tilacino, o tigre de Tasmania, fue declarado extinto en 1986, una vez transcurridos los 50 años sin pruebas de vida que exige la comunidad científica. Aún así, muchos curiosos y turistas aseguran haberse topado con un tilacino desde entonces. En 1973, alguien grabó unas misteriosas imágenes en las que muchos han creído distinguir la figura del tigre de Tasmania. Al igual que el tilacino, al final de la película, el animal se pierde como un fantasma en la oscuridad.
Más: 1, 2, 3 / In English: The last thylacine