En el verano de 1963, el profesor Rodríguez Delgado se coloca por primera vez en su vida delante de un toro, lo cita una y otra vez con el capote y cuando está a punto de embestirle consigue hacer que se detenga. El secreto, más allá del temple del torero, está en el mando a distancia que sostiene entre sus manos: el profesor ha instalado un radiotransmisor en el cerebro del novillo que le permite controlar sus movimientos. (Seguir leyendo) (English)
In English: How to control a charging bull with a radio transmitter
* Esta es una vieja historia de Fogonazos. Encontrar el video en Youtube me ha parecido la excusa perfecta para recordarla y para hacer una versión en inglés.