La compañía estadounidense Telair lleva años realizando pruebas con el objeto de mejorar la seguridad en los aviones y la resistencia de los materiales. Por increíble que parezca, tal y como demuestra National Geographic en uno de sus últimos documentales, la empresa ha conseguido desarrollar un sistema capaz de absorber una explosión en pleno vuelo y minimizar los daños.
El compuesto contiene una mezcla de kevlar con otros componentes y tiene la virtud de resistir cualquier impacto. De momento se ha utilizado para fabricar las puertas de la cabina de los pilotos (para evitar experiencias como las del 11-S) y en la fabricación de contenedores para transportar el equipaje. Pero, como veréis en el vídeo, también se prueban los paneles con vista a incorporarlos en algún momento en el fuselaje. El resultado, suponiendo que resuelvan el problema de la onda expansiva, recuerda a la famosa paradoja: "¿Por qué no construyen el avión con el mismo material que las cajas negras?. Tal vez no esté tan lejos ese día.
Si quieres, menéalo.
El compuesto contiene una mezcla de kevlar con otros componentes y tiene la virtud de resistir cualquier impacto. De momento se ha utilizado para fabricar las puertas de la cabina de los pilotos (para evitar experiencias como las del 11-S) y en la fabricación de contenedores para transportar el equipaje. Pero, como veréis en el vídeo, también se prueban los paneles con vista a incorporarlos en algún momento en el fuselaje. El resultado, suponiendo que resuelvan el problema de la onda expansiva, recuerda a la famosa paradoja: "¿Por qué no construyen el avión con el mismo material que las cajas negras?. Tal vez no esté tan lejos ese día.
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