Gráfico: Carlos Gámez (lainformacion.com)
Encogidos, como si los hubieran lavado con agua caliente. Así han quedado los presupuestos de los principales Organismos Públicos de Investigación, que es tanto como decir el núcleo de la investigación científica de nuestro país. Los datos saltan a la vista, a pesar de que la responsable del recorte, la ministra de Ciencia e Innovación Cristina Garmendia, tratara de venderlo ayer como una especie de éxito y se mostrara sorprendida por el enfado de los investigadores.
Las personas que se han levantado contra esta situación, las decenas de científicos que han firmado cartas de protesta, no son cuatro desarrapados con ganas de armar jaleo. Se trata de algunas las mentes más brillantes de este país que llevan años sacrificándose por un sistema que no les trae más que sinsabores. Muchos de ellos, me cuentan, cobran menos dinero que cualquiera de sus becarios que salen al extranjero y tienen auténticas dificultades para continuar con proyectos que requieren de esfuerzo, dedicación y paciencia.
La decisión de recortar la inversión pondrá a decenas de jóvenes investigadores en la calle, con el agravante de que muchos de ellos habían abandonado sus becas en el extranjero para regresar a un sistema que parecía levantar cabeza. Pero el "cambio de modelo económico", y la apuesta por la investigación de la que tanto presumía el presidente, eran sólo otro episodio de palabrería barata. En las circunstancias de crisis actuales, ésta es, además, la peor noticia económica que podía tener un país como el nuestro. España es el único estado de nuestro entorno, con la excepción de la Italia de Berlusconi, que ha metido las tijeras en en el futuro de sus ciudadanos.
Siguiendo la iniciativa de Aldea Irreductible, hoy cientos de blogs estamos publicando nuestro rechazo a este recorte y recordando que "La Ciencia española no necesita tijeras". Yo he hecho lo que más me gusta y lo que vengo haciendo toda la vida: hablar con los que saben y pedirles que me aclaren lo que sucede. Espero que mi artículo sirva para apuntar algunas de las claves de este sinsentido, o al menos para ponernos sobre la pista. #tijerasNO
Leer el artículo: “Por favor, señora ministra, no tire nuestro futuro por la ventana” (lainformacion.com)