El ranisapo, del que ya hemos hablado por aquí, es uno de los depredadores más rápidos del océano. En un abrir y cerrar de ojos es capaz de capturar a su presa y, a juzgar por el siguiente vídeo, debe tener uan digestión bastante pesada:
Juraría que eructa al final. Ver también: Pez sapo, las fauces más rápidas del reino animal (Fogonazos) / Cuando el pez chico se come al grande (Fogonazos).