Cualquiera que lleve un tiempo en la red sabe lo pesado que puede llegar a ser un troll. En Fogonazos, por ejemplo, la medida de moderar los comentarios fue mano de santo y apenas tengo que borrar algún que otro insulto muy de cuando en cuando. Pero los moderadores de foros tienen que usar algunas medidas ingeniosas.
A través de un tweet de Ed Yong me entero de que existen varios sistemas bastante refinados y algo perversos para quitarse de encima a los trolls. Los expone el programador Jeff Atwood en su web Coding Horror:
1. Hellbanning. Consiste en convertir al troll en invisible para el resto de usuarios pero no para sí mismo. Desde su punto de vista, ellos están participando normalmente en la comunidad pero nunca les responde nadie. No pueden interrumpir la conversación porque de hecho son meros fantasmas. Es una manera clara y cómoda de imponer la ley de "Don't feed the troll" (No alimentes al troll) en la comunidad. Finalmente terminan frustrándose y se van. Hay una variedad del hellbanning particularmente cruel, explica Atwood, que es permitir que los trolls puedan verse entre ellos, pero que no los pueda ver nadie más. Me encanta.
2. Slowbanning. El usuario sufre retrasos forzados en la navegación y desde su punto de vista tu web se ha vuelto insoportablemente lenta. Esto les impide la participación normal y se acaban largando desesperados sin saber que la mente maquiavélica del programador está detrás de la maniobra.
3. Errorbanning. Es una variante del anterior, pero en este caso al troll le aparecen los más variopintos mensajes de error alternativamente hasta que se vuelve loco y termina desistiendo. Igualmente refinado y maravilloso.
Así que ya sabéis, si ésta u otra web empieza a ir especialmente despacio o nadie os contesta, quizá estáis siendo víctimas de vuestro comportamiento troll (Muahahaha!)
Más info: Suspension, Ban or Hellban? (Coding Horror)
