Descubro a través de un interesante hilo en Twitter de @kr_wittmann la historia de las trenzas de Palenque, una localidad colombiana en la que los esclavos ingeniaron una manera de pasar información para escapar de sus amos mediante los peinados de las niñas. En la web de la ICDE se resume bien:
"Las mujeres, cada vez que salían a trabajar, observaban el entorno y al finalizar la tarde, se reunían en los patios y allí peinaban a las más pequeñas. En sus cabezas diseñaban mapas llenos de caminitos y salidas de escape, ubicando sendas, árboles grandes, zonas boscosas, ríos y montañas.Para saber más: Las trenzas de Palenque: Mapas hacia la Libertad / 'Prison Break' en la vida real: las esclavas que se liberaban gracias a los mapas en su pelo (La Verdad) / Hilo sobre el tema
Estos peinados se convirtieron en unos verdaderos códigos de rutas de escape que permitían a los esclavos huir.
- Si el terreno era muy pantanoso, las tropas, es decir, las pequeñas trenzas pegadas al cuero cabelludo, se tejían como surcos.
- A través de pequeños moños, nudos y trenzados las mujeres marcaban los puntos del paisaje: un árbol, un camino, un sembrado.
- Los mapas comenzaban en la frente y se iban adentrando hasta la nuca.
- Las trenzas servían también para establecer sitios de encuentro."